Hace ya un tiempo cayó en mis manos un interesante y recomendable ensayo llamado Templarios y otros enigmas medievales del historiador Juan Eslava Galán, un ensayo con el que he pasado muy buenos ratos leyendo curiosidades medievales: el origen de la leyenda del Santo Grial, sobre el Rey Arturo y los caballeros de la Tabla Redonda y los lugares artúricos, sobre la búsqueda del tesoro de Salomón, etc .
Quisiera compartir con vosotros una de las partes que me llamó más la atención, que trata sobre el ajuar que recibían los caballeros templarios cuando entraban a formar parte de la Orden, que siguiendo la austeridad de la orden, éste era básico y debían cuidarlo esmeradamente. Cabe recordar que los caballeros se despojaban de todas sus pertenencias al entrar en la Orden del Temple y una vez dentro, no podían dar ni aceptar regalos.
Así que sus únicas pertenencias eran:

- Un equipo militar completo para las cruzadas: loriga, calzas de hierro, casco con protección nasal, yelmo, espada, puñal, lanza adornada de gallardete blanco, escudo largo y triangular, cota de armas blanca y gualdrapa para el caballo. La cruz paté de la orden figuraba en el gallardete de la lanza, en el extremo superior izquierdo del escudo y en la cota. En campaña también eran reglamentarios un caldero, un hacha para cortar leña, un rallador y un juego de escudillas y frascos.
Si queréis saber más, aquí os dejo la referencia del libro. ¡ Que lo disfrutéis !
Eslava Galán, J. (1992). Los templarios y otros enigmas medievales. Barcelona: Editorial Planeta- De Agostini